PONENCIA DE ALBA ROSA BARRETO

LA LUCHA ARMADA EN  EL ORIENTE DE VENEZUELA

Alba Rosa Barreto

albajosefinabarreto1956@gmail.com

Miembro del Secretariado del Comité Politico Nacional (CPN) de Bandera Roja

Responsable del Comité Politico Regional “Hugo Guzmán Jaramillo”, Anzoátegui.   

Ponencia

Seminario: “La Lucha Armada en el Oriente de Venezuela, 1965 – 1994”

Caracas, Escuela de Historia, Universidad Central de Venezuela (UCV)

Noviembre 2023

     INTRODUCCION

Quiero iniciar este material, dándole un agradecimiento muy especial al Comité Organizador de este evento: "Seminario de Memoria Histórica sobre la Lucha Armada en el Oriente de Venezuela"; al profesor historiador, Dr. Roberto López Sánchez (Coordinador, Unidad Académica de Antropología, ULA); Dra. Elia Oliveros (Universidad Simón Rodríguez) y el Dr. Leonardo Bracamonte (Director, Escuela de Historia UCV). No puedo quitarles sus créditos al Historiador, Pedro Figueroa, que me hizo llegar toda la información inicial.

Decía que estaba muy agradecida tanto por haberme invitado a participar (visto los invitados ponentes pareciera que soy la única dama en estos menesteres), como por el hecho de que le doy un valor de importancia el mantener vivo y en activo debate los sucesos políticos, sociales y militares, que estuvieron involucrados en plena década de Lucha Armada (1960_1970), -desde 1965, como se exige-, y sus subsecuentes derivaciones, dos décadas después, hasta 1994; que han puesto a la lucha revolucionaria en un lugar intrínsecamente vinculado a la historia contemporánea de nuestro país.

Sigo aplicando mi juicio valorativo, la lucha revolucionaria por lo que implica en sí misma sus objetivos, no debe ser desdeñada, ni subestimada o solo utilizada como un cuento para la historia. A la vista están los acontecimientos nacionales e internacionales, donde los pueblos siguen enfrentando con decisión a los gobiernos antidemocráticos, despóticos, indolentes y represivos.

Quisiera hacer una aclaratoria que me parece justa y necesaria. Mi persona y muchas otras más que abrazamos con sentido de pertenencia la causa revolucionaria (fueran jóvenes o adultos), lo hicimos por nuestras ideas libertarias, por nuestros ideales emancipador es; nunca por utopías o fantasías irrealizables. Estábamos convencidos que el pueblo, el campesinado y la clase obrera, dirigidos por su vanguardia política iban a adquirir la suficiente conciencia de clase para hacer la Revolución, tomar el poder político y construir un gobierno revolucionario y socialista. En BANDERA ROJA, no jugábamos a las utopías, intentamos superar errores pasados; la lucha revolucionaria era y sigue siendo un compromiso muy serio y todos sabemos que una revolución la hacen los revolucionarios.

Teníamos la responsabilidad de hacer análisis concretos de la situación concreta, basados en nuestra formación ideológica marxista-leninista y en el uso adecuado de la dialéctica para desechar planteamientos subjetivos y arribar a conclusiones lo suficientemente claras y objetivas para que las decisiones fueran coherentes y realistas.

Así como hacemos este Seminario, vendrán momentos donde estaremos haciendo los análisis políticos e históricos respectivos, para que las nuevas generaciones se informen de los beneficios o atrasos que estás décadas de "revolución" le han dejado al país. Después de 24 años (casi similar al tiempo que hoy debatimos sobre la Lucha Armada), sería interesante evaluar si vivimos tiempos de "utopía revolucionaria" o tiempos de sobrevivencia extrema por los disimiles problemas que sacuden al país.

BANDERA ROJA, LUCHA DE MASAS Y LA LUCHA ARMADA EN ORIENTE.

           No tengo la menor duda, que durante todo ese proceso de Lucha Armada que se extendió desde 1965 hasta 1994, BR, mantuvo un papel estelar de 24 años de perseverancia ininterrumpida en su aplicación teórico-práctica, de las diversas tácticas aprobadas en función de una estrategia de Guerra Popular Prolongada por la toma del poder.

Nacimos de esos hombres y mujeres que no claudicaron y desde enero de 1970, cuando nace el partido, hasta mayo de 1994, fecha que desmovilizamos el Frente "Américo Silva", de forma unilateral y consensuada en el máximo organismo de dirección del partido, su Comité Central (CC), la historia de estos dos instrumentos de lucha es densa y extendida; llenas de tribulaciones casi constantes pero también de muchas satisfacciones, porque con la desmovilización, los guerrilleros, salimos a seguir en el combate de calle. Tuvimos un cierto número de camaradas caídos en combate, que nunca olvidaremos y también algunos detractores que aún critican los presuntos errores de los demás y son incapaces de reconocer los propios y señalar sus debilidades, que pueden explicar su desmoralización, su abandono, su deserción o su traición.

Fueron años terriblemente difíciles en estos estados de oriente, porque la represión gubernamental y los operativos policiales de todos los organismos de seguridad, se concentraron en estos territorios por la desaparición de los frentes guerrilleros en centro-occidente y por la merma del activismo político de otras organizaciones revolucionarias.

En cumplimiento de su objetivo de hacer la Revolución y desalojar del poder a las fuerzas imperiales norteamericanas, a terratenientes y burguesía criolla, -señalados como enemigos de la clase obrera y del pueblo-, representados y defendidos por los gobiernos de turno de AD-COPEI; el Partido tuvo que apelar a todas las formas de lucha político-organizativas, vinculadas a la estrategia de Guerra Popular. Elaboramos políticas para el movimiento obrero-sindical, para el movimiento estudiantil y una línea de masas en general. Pero la línea política no era suficiente, era necesario liderar y ser vanguardia de esos movimientos.

En el sector estudiantil, estuvimos en la dirección de sus estructuras organizativas  durante muchos años, fueran estas de educación media o superior; nuestros cuadros estudiantiles estuvieron en primera línea de combate, derrotando posiciones reformistas y reaccionarias de los líderes que defendían esas tendencias políticas.

También el movimiento obrero-sindical ameritó de serios esfuerzo por el control absoluto que mantenían AD-COPEI; no solo de los sindicatos de bases, sino Federaciones Regionales y Nacionales, incluida la CTV. Como partido de vanguardia de la clase obrera, decidimos pelearles los espacios sindicales de bases y por la jerarquización que siempre ha tenido este trabajo fueron desplazados muchos cuadros políticos para ingresar a fábricas y empresas para hacer el trabajo organizativo desde adentro. Sectores como: petrolero, metalúrgico, textil, pesquero, magisterio, dependencias públicas y otras, fueron caracterizadas de importancia estratégica para el avance del partido y del proceso revolucionario en todos sus frentes de trabajo. Incorporamos a líderes naturales de los trabajadores para convertirlos en cuadros sindicales y confrontar con los reaccionarios para ser vanguardia de esas duras luchas sociales y laborales donde las protestas y movilizaciones eran el pan de cada día; la protesta en los sitios de trabajo, los reclamos laborales, la huelga, la defensa, la toma de calles eran esenciales para no dejarse intimidar y acorralar por las bandas armadas y policiales del bipartidismo y sus aliados.

La pelea contra los reaccionarios capitalistas y fondomonetaristas neoliberales eran constantes e intensas y los gobiernos de turno desde Caldera I (1968), hasta Caldera II (1993), jamás vacilaron en darle más fortaleza y poder a esas clases dominantes en detrimento continuo de la clase trabajadora, el campesinado y los sectores empobrecidos del país.

Rafael Caldera, Carlos Andrés Pérez I, Luis Herrera Campíns, Jaime Lusinchi, Carlos Andrés Pérez II, en ese orden, hasta volver a Rafael Caldera, fueron presidentes que sobre hombros y conciencia descansan las responsabilidades y órdenes que llevaron a la ejecución de sanguinarias represiones, asesinatos, desapariciones y masacres de revolucionarios, campesinos, estudiantes y de todo ese pueblo que levanto las banderas de la solidaridad y de cambio político revolucionario.

En esta confrontación antagónica entre capitalismo y socialismo, se le dió un papel relevante a la propaganda y la lucha armada con operaciones militares de diferentes niveles; unas realizadas por el Frente Guerrillero   "Antonio José de Sucre", desde el mismo momento que nace BR de su propio seno, hasta que por diferencias políticas de principios y expulsión de su comandancia se desprende de la dirección del partido y nace el  nuevo Frente Guerrillero "Américo Silva". Pero para el Partido y su línea militar, un elemento de mucha importancia, fue reivindicar el concepto de la lucha de clases, de muy bajo perfil en los escenarios políticos y de significación trascendental para consolidar los valores y principios del revolucionario comunista.

Años de dura brega, en todos los campos de trabajo, que sirvieron para elevar los niveles de conciencia del pueblo, fortalecer nuestro compromiso con los sectores explotados, acentuar las protestas de calle y el ascenso del movimiento popular y revolucionario. Solo truncado y descabezado por el azote represivo del régimen.

Lo que el partido nunca soslayo en correspondencia con la lucha de masas y la lucha revolucionaria, fue el trabajo organizativo en todos los sectores dónde tuviéramos presencia política. Tanto el Partido como su Frente Militar, desplegaron un trabajo organizativo de masas con resultados altamente positivos. La Lucha Armada no estuvo disponible solo para la ofensiva militar, sino también para conectarla con la conflictividad social; donde el trabajo organizativo le permitía a la guerrilla conformar gobiernos locales;    neutralizar o sabotear las acciones del gobierno en las zonas de su influencia; organizar al campesinado para la producción y cooperación agrícola y el entrenamiento militar para constitución de milicias campesinas.

El amplio territorio oriental que comprende: Anzoátegui, Sucre Monagas, Bolívar y una extensa porción de Guárico, en menor valía, Nueva Esparta; le dimos excepcional atención por la combinación político-militar que hicimos creando estructuras organizativas de masas que podían ser: clandestinas, legales o semiilegales; pero también participando electoralmente en los organismos existentes aceptado por el gobierno. Fueron los Comités de Luchas Populares (CLP), los Comités de Luchas Obreras, los Comités de Estudiantes Revolucionarios (CLER), las estructuras de fachada legal del Partido que asumieron el trabajo de masas más allá de los años de 1980. Algunos de uso tradicional y mucha combatividad: los Comités de Amigos del Partido, los Comités de Solidaridad con el Frente Militar, los Comités por la Libertad de los Presos, los Comités de Defensa de los Derechos Humanos y otros puntuales, según la lucha presente.

Pasemos una revista a nuestra participación en el movimiento obrero de Edo. Bolívar, sobre todo en Ciudad Guayana, dónde reside el Holding de Empresas Básicas de la CVG. Muy importante el traslado de Cuadros Nacionales, para la labor de dirección y la incorporación de Cuadros Medios en todas estas empresas: SIDOR, ALCASA, VENALUM, FERROMINERA, BAUXILUM, CARBONORCA y otras; en la misma Hidroeléctrica Raúl Leoni (GURI). Todas estas empresas fueron infiltrados por el partido para el trabajo político-organizativo del movimiento obrero metalúrgico, con una dirección externa clandestina representada en camaradas con una vasta experiencia militar. Allí estuvieron: Américo Silva, Francisco Jiménez, Vicente Contreras Duque, Tito González Heredia, Juan Pablo Miranda, etc.

Fueron resaltante e histórico los triunfos obtenidos en elecciones del movimiento obrero-sindical con alianza de diversos factores de izquierda que derrotaron a mafias seculares del bipartidismo. En esos tiempos, en los sindicatos de las empresas básicas, nuevos líderes asumieron la dirección de los mismos. La alianza sindical de Causa R, BR, Liga Socialista, Grupos de Acción Revolucionaria (GAR) y otros, fue triunfadora y permitió deslastrar a los trabajadores de esos bandoleros sindicalistas que parecían sanguijuelas humanas, favoreciendo al patrón.

Las luchas reivindicativas a la par de las luchas políticas, dirigidas por nuestros líderes obreros, las hicieron a riesgos de su propia vida y con un elevado nivel de empatía y compromiso con el partido y los trabajadores del hierro.

Hoy les doy un fervoroso reconocimiento a todos esos camaradas, legales y clandestinos, que lograron ser protagonistas de esa gesta histórica de romper con la hegemonía del "Pacto Puntofijista", en el movimiento obrero en Guayana. Quizás una de las derrotas más sensibles y dramáticas del bipartidismo, en ese entonces.

Digno reconocimiento de mi parte a mis camaradas: Domingo Rivero, Feliciano Guzmán, Franklin Gómez, Neptali Febres, Gabriel Moreno, Francisco Mendoza, Oswaldo Arenas (dirigente magisterial con ascendencia en el movimiento obrero, asesinado en la cárcel de La Pica); y los que desde la clandestinidad también cumplieron: Juan Pablo Miranda, Miguel Vázquez, Luis Franco, Marino Alvarado, Hipólito Luna, Agustín Peña y otros.

Por el lado de la Industria Pesquera, en el estado Sucre, fueron muy significativos los triunfos en los sindicatos de la pesca y la disposición de los trabajadores en general, a la movilización; en reclamo y defensa de sus intereses y derechos laborales. Siempre en alianza con el movimiento estudiantil udista, que le inyectaba fortaleza y determinación a los proletarios de las industria de la pesca. También mis reconocimiento a los dirigentes: Miguel Tenías, Petra Jiménez, Cruz Marcano (+), Alexis Rojas (+), Francisco "Choco" Mayz (+), Carmen Rosa García (+), Jesús Pérez y otros.

De la misma manera, el movimiento estudiantil no estuvo s la zaga de nadie. Vivió momentos de mucho crecimiento y libro luchas enconadas y sangrientas en las trincheras de la calle; defendiendo su independencia y autonomía, despojándose del control gubernamental y ligándose con las luchas del pueblo.

Se hicieron constantes los triunfos y la influencia de los estudiantes revolucionarios en los gremios estudiantiles, tanto de educación media como universitaria, atendiendo con vehemencia la labor cultural.

Barrios completos eran "tomados" por estudiantes de la UDO, de los diferentes núcleos en los respectivos estados, militantes de BR, para hacer teatros, mítines políticos, movilizaciones aguerridas para reclamar mejoras y soluciones, participación y organización en sus Asociaciones de Vecinos; también "tomas" de carácter militar y reparto de propaganda subversiva. Los Frentes Guerrilleros (AJS y FAS), en sus etapas correspondientes, recibieron en sus filas a grupos continuos de obreros y estudiantes,  que "subían" a instruirse en la teoría y la práctica de los conocimientos militares elementales para tener un mejor ataque o defensa contra el enemigo; aprender "golpes de mano" para la obtención de variados recursos, sobre todo, armamentos; y para adquirir mayor destreza, confianza y seguridad, en el cumplimiento de tareas y misiones. Unos "subían" como pasantes y otros a ser guerrilleros regulares del Frente.

Tres consignas fueron emblemáticas en tan difíciles días de lucha y era un reto y un compromiso que nos llenaba de orgullo y satisfacción, verlas escritas en cualquier pared de las seleccionadas, cuando llegaba el amanecer. Siempre la hacíamos de madrugada, con un sustico encima, por el riesgo de que nos sorprendiera el enemigo.

Estas fueron las consignas:

1._ CONTRA LA VIOLENCIA DE LOS RICOS, VIOLENCIA DE LOS POBRES!!

2._ BANDERA ROJA ES TU PARTIDO, INCORPORATE!!

3._ CON LA LUCHA ARMADA HACIA EL SOCIALISMO!!

Todos sabíamos lo peligroso de hacer una  "pinta", y mucho más si la intentábamos hacer en la pared más arriesgada, pero con más vista; o colocar una bandera con nuestros símbolos para que el pueblo las viera flamear en un sitio especial; o de hacer explotar una "calemba", en un lugar público concurrido; sin embargo, lo hicimos tantas veces como fue necesario.

Pese a la bestialidad represiva que se ejecutó contra la militancia de BR, muchísimos camarada cumplieron con esas tareas esenciales; hicieron su pasantía o se convirtieron en guerrilleros y si pasaron por prisión, tuvieron una conducta irreductible.

Otros, con algunas de esas experiencias, sufrieron "traumas" irreversibles que los indujeron a abandonar al Partido y al movimiento revolucionario para aparecer unos años después al lado del comandante Chávez, reconociéndose  como revolucionarios "puros" y "auténticos comunistas", defendiendo su carguito y su revolución bonita. Algunos, de data más reciente, con el oportunismo clásico del arribista, se suman al corito y con todo desparpajo te acusan de traidor. Y yo me preguntó: ¿traidor de qué?

BANDERA ROJA: FRENTE GUERRILLERO "ANTONIO JOSE DE SUCRE" Y FRENTE GUERRILLERO "AMERICO SILVA".

Bandera Roja, nació de las entrañas del Frente "Antonio José de Sucre" (FGAJS), que ya existía desde el año 1966 y tenía como teatro operativo, el vasto territorio de los estados orientales. El MIR iba a su legalización y arrastraba al Frente a su pacificación. Entre otros, dos compromisos  impostergables surgió de ese 1er. PLENO NACIONAL DE CUADROS, realizado en el Frente: 1) Acordar el nacimiento de BR, como Partido del Proletariado y 2) Continuar la Lucha Armada. Así quedó el acuerdo establecido en ese 1er. Pleno de Cuadros. Pero también quedó concertado en ese debate un aspecto de irrebatible importancia estratégica: el Partido es el ente motor en la dirección del proceso revolucionario; en el aspecto organizativo, todas sus células, estructuras organizativas  y militancia, se acogen al principio leninista del Centralismo Democrático: la decisión de las mayorías se respeta y es ley. La decisión de los organismos superiores, - y los Plenos de Cuadros tenían esa jerarquía-, se respeta y es ley para los organismos inferiores.

La trayectoria de FGAJS, fue ejemplar y moralizante en ese tiempo crucial que significó la derrota de la lucha armada y la pacificación de los cuadros de dirección nacional del MIR. 

La capacidad operativa, su despliegue organizativo, el apoyo irrestricto al crecimiento del Partido, el trabajo campesino, la propaganda armada y tantas actividades; todas juntas, sumaron para levantar la confianza y la esperanza y opacar esa campaña desmoralizante que condujo el gobierno y los enemigos de la Lucha Armada, intentando enterrar todo vestigio de revolución.

Más que notables y hoy conocemos algo más de sus pormenores, los secuestros para la consecución de recursos financieros: Domínguez, Dao y Molinos Palacios. Los intentos de secuestros políticos para negociar la libertad de todos los revolucionarios: a Lorenzo Fernández y Gonzalo Barrios. Por cierto, el de los hermanos Molinos Palacios y el fallido de Lorenzo Fernández, se hicieron en tierras orientales: Monagas y Sucre. La fuga del Cuartel San Carlos y la de la cárcel de La Pica, también tuvieron escenarios orientales. Superamos en inteligencia y astucia, a los cuerpos de inteligencia de la policía.

El FGAJS, tenemos que certificar que cumplió una larga etapa de éxitos  políticos-militares, desde 1966 hasta 1976, sin que la fuerzas armadas y órganos de seguridad del estado lograrán infligirle ningún daño en su acorazada estructura militar. Ningún cerco militar, ninguna delación, ninguna operación de inteligencia o contrainteligencia, hizo mella en su funcionamiento y su operatividad militar.

Su destrucción comenzó desde adentro y se consumó en marzo de 1976, porque considero que esa fecha fue el "principio del fin" de nuestro prestigioso Frente Militar y donde la responsabilidad principal de su extravío de brújula  y desmantelamiento recae en: Carlos Betancourt y Pablo Hernández Parra. Solo ellos se creen la distorsión que han querido hacer de los hechos.

La realización del IV PLENO NACIONAL DE CUADROS, como un organismo de jerarquía nacional con la protección de la misma guerrilla, implicaba un altísimo compromiso por la importancia de cada cuadro nacional y la agenda que debían discutir.

Al rechazar la nueva tactica que planteaba ampliar la cobertura política para utilizar las diferentes formas de lucha, fueran estas legales o ilegales, reivindicativas o políticas, violentas o pacíficas; una línea política que insertara al partido en el movimiento de masas, en las luchas concretas del pueblo, con vínculos directos en el sector vecinal, obrero, estudiantil, profesionales, campesinos, etc. Crear estructuras políticas que permitiera legalizar dirigentes para disputar la dirección de las masas. Esta táctica resultó contradictoria con la propuesta foquista de acentuar la actividad militar y darle mayor preponderancia al Frente Militar.

Ellos eran la comandancia y siendo una minoría fraccional foquista y caudillesca impidieron el debate democrático y abierto en el seno del colectivo guerrillero. Le retiraron la protección a los cuadros y les crearon un serio problema de seguridad. Además de acusarlos de derecha, reformistas y claudicadores de la Lucha Armada.

Al violar la disciplina del partido (su condicion de militares no los excluye de esta responsabilidad); no respetar el Centralismo Democrático; utilizar las armas para suspender el Pleno y poner en riesgo la seguridad de los  Cuadros; el IV PLENO NACIONAL DE CUADROS, con la mayoría absoluta, decidió expulsar de BR, a los excamaradas mencionados.

Ellos, como supuesta fracción de izquierda, asumieron el control del Frente Guerrillero, para seguir la Lucha Armada y la mayoria de los Cuadros, como fracción de derecha, según ellos, siguieron con la dirección del Partido.

Nunca quisieron entender los excamaradas por sus posiciones obstinadas y ultraradicales que Partido gobierna al fusil y trataron de justificar por diferentes medios, con acusaciones desmedidas e irracionales que los culpables de la pérdida irreparable del FAJS, fue de otros y no, exclusivamente, de ellos.

La realidad es que poco a poco, iremos conociendo la verdad de los hechos y se irán develando con la intervención de los protagonistas, - los pocos que sigan vivos-, y con la averiguación exhaustiva de los historiadores.

Puede ser que por las condiciones de la lucha de extrema seguridad, la clandestinidad, la responsabilidad personal, las continuas tareas, la reserva en la información, la compartimentacion, etc., se haya parcializado la información; pero yo diría, partiendo de mi experiencia, es que BR, nunca ha tenido tiempo, no le ha dado importancia, ni ha estado pendiente de darle respuesta a cada detractor, embustero o irresponsable que pretenda darse mérito en detrimento del Partido.

Y como los hechos son incuestionables y las pruebas son la mejor evidencia: el finado, Carlos Betancourt y el excamarada, Pablo Hernández P, no construyeron un partido M-L; no tuvieron ni táctica ni estrategia; se anarquizo el Frente; se desgajo en varios trozos; todos se desmoralización; varios guerrilleros se convirtieron en policías DISIP y DIM (entre ellos, los hermanos Rebanales); algunos de los expulsados negociaron su pacificación y legalización con el Presidente LHC y el sector de "izquierda" que dirigían se quedó sin revolucionarios y sin perspectivas.

Muy lamentable estos sucesos. Con mayor conciencia, menos soberbia, cumpliendo con el Centralismo, deponiendo rivalidad de liderazgos, respeto a los órganos de dirección, pudimos haber evitado este terrible desenlace.

Fue un golpe contundente pero no mortal.

Después de este peligroso trance que culminó con la expulsión de estos jefes guerrilleros, los cuadros de BR, se distribuyeron el país con la misión de fortalecer el Partido y trabajar por la construcción del nuevo Frente. Así lo discutimos en nuestros órganos de militancia que formaban parte del Distrito "Trino Barrios"(que abarcó todos los estados orientales). Nunca se discutió en BR, que la Lucha Armada desaparecía del contexto estratégico por la toma del poder.

El Partido redobló sus esfuerzos y bajo estrictas medidas de seguridad dió a conocer el 14 de agosto de 1977, que ya BR tenía su Frente Guerrillero con la fuga de los 13 presos políticos de la cárcel de La Pica, Edo. Monagas. La militancia y el país vieron aparecer al Frente "AMERICO SILVA", nombre acordado por el Comité Político Nacional (CPN), en su primera reunión, organismo electo en el IV PLENO NACIONAL DE CUADROS. De esta manera se le rendía homenaje al camarada caido en combate, Americo Silva, destacado  comandante fundador del FGAJS y de nuestro Partido.

Mientras se perdía el FGAJS, entraba en operatividad politico-militar el Frente Guerrillero “Américo Silva (FAS), demostrando que el camino de la Lucha Armada en combinación con la táctica aprobada, fortalecía el trabajo de masas, al Partido, al Frente y a la lucha revolucionaria en curso.

Su Primer Comandante fue, Pedro Véliz Acuña hoy, Pdte. del Partido; y gracias a la liberación de ese importante grupo de Cuadros Nacionales, el FAS, logro recuperar todas las bases de apoyo, rurales y urbanas; fortalecimiento del equipo de dirección politico-militar, mayor nivel de operatividad militar, formación política de los campesinos, entrenamiento e incorporación de milicianos, ampliación de las áreas de influencias, mejoramiento en las relaciones mando-combatientes, etc.

El FAS, como Ejército Popular, vivió momentos de gran importancia en la lucha contra los gobiernos capitalistas, pro imperialista y entreguista de nuestras riquezas, como instrumento armado del partido por la conquista del poder político y por un gobierno democrático y popular y por el socialismo.

Desde su nacimiento en agosto 1977 hasta su desmovilización en mayo 1994, transcurrieron 17 años en su peregrinar revolucionario, solo interrumpido temporalmente por el Combate de CANTAURA (convertido en masacre), el 4 de octubre de 1982; pero cuatro meses después, en enero de 1983,  ya estábamos reconstruyéndolo, con los sobrevivientes, los nuevos que quisimos ser combatientes y una comandancia auxiliar, que cumplió con su compromiso revolucionario. Y continuamos la lucha 11 años más, con nuevos comandantes, forjados al calor del compromiso, con nuevos combatientes entrenados, disciplinados y firmes con el Partido; con una Comisión Militar Nacional, que planifico, ejecutó y cobro en operaciones militares, financieras y logísticas.

Algunas de las acciones que recuerdo ahora, La toma de la Alcabala – Puesto Militar de Santa María de Ipire (1981) dirigida por el Catire Roberto Rincón (una baja del enemigo), encuentro militar en el Caserío Las Peñas, 1980, (7 bajas del enemigo), en la zona de Cariaco, Estado Sucre. El enfrentamiento en la Alcabala de Zaraza, Estado Guárico, 27 noviembre 1992 (dos bajas nuestras, 4 bajas del enemigo)

Podríamos hacer un resumen de las etapas más resaltantes del FAS:

1) Su creación en mayo de 1977.

2) La liberación de 13 presos revolucionarios en agosto 1977, cárcel de La Pica.

3) Su apoyo a la realización del 1er. Encuentro Nacional Campesino, hecho en Cariaco, Edo. Sucre.

4) El combate de Barbacoa, Barcelona; dónde las fuerzas militares del gobierno, sobre todo la DISIP, sufrieron un duro revés con muchas bajas y un prisionero (DISIP), liberado un mes después. Mayo 1982.

5) El combate de CANTAURA, convertido en masacre, con la muerte de 23 guerrilleros, incluidos tres de sus comandantes. Octubre 82.

6) La reconstrucción que se inicia en enero 83, con la reincorporación de los sobrevivientes y nuevos combatientes.

7) La participación en los levantamientos cívicos-militares, tanto en lo rural como lo urbano, en febrero y noviembre de 1992, para derrocar al Pdte. Carlos Andrés Pérez.

8) La desmovilización guerrillera, en el sector Bella Vista, cerró El Mono, Edo. Sucre, con la presencia del gobernador, Ramón Martínez.

A TODOS, mandos y combatientes, hombres y mujeres, que con sus esfuerzos y sacrificios y su enorme pundonor revolucionario lograron reconstruir el FAS. A los que llegaron hasta el final, a los que arriaron banderas y no llegaron. A los que no avanzaron porque murieron. Todos tenemos el honor de ser parte de esta historia, en la misma medida de lo que fue nuestro compromiso revolucionario. A los traidores y delatores que los juzgue el pueblo soberano.

Pero tengo que rendirle homenaje a un camarada que le dedicó su vida a esta hermosa lucha y por ella murió: GILBERTO LOPEZ, nuestro querido  "Redondillo".

UN RESUMEN CRÍTICO

En estos nuevos tiempo que vive la sociedad venezolana, sean buenos  para los nuevos ricos o malos para las mayorías (seguro que tendrá su espacio para el balance respectivo); se nos abre una ventana para el análisis mesurado, profundo y sin pasiones de todo el proceso de Lucha Armada y sus incidencias políticas y sociales tanto en el pasado como hacia el presente. Podemos deducir que si se democratizara la información, si fueron desclasificados los documentos  secretos y los protagonistas y los estudiosos o investigadores, tenemos mejor posibilidad de explorar esas realidades y hasta contrastar versiones unilaterales, personalistas y acomodaticias. Es el momento de acercarnos al equilibrio de la verdad,  para que sean conocidos los hechos más connotados, en el duro y sangriento trajinar en la cual se convirtió la Lucha Armada como el camino más expedito para desalojar del poder a las clases dominantes.

En BANDERA ROJA, este compromiso lo asumimos con gallardía y responsabilidad; no iba a ser fácil derrotar a un gobierno con el apoyo incondicional de los gobiernos norteamericanos. No fuimos como analfabetas funcionales a esta guerra.

El Partido nunca subestimó a los enemigos, ni internos ni externos. Se esforzó, por  toda la complejidad de esta lucha, en darnos la educación política-ideológica y los conocimientos, incluidos los militares, para formar cuadros a la altura de las exigencias que de las exigencias que ibas a confrontar en una estrategia de Guerra Popular Prolongada. BR fue nuestra propia Escuela de Cuadros.

No vamos a negar que el enemigo nos asestó duros golpes con armas de cualquier calibre; pero siempre hubo respuestas inmediatas para la recuperación.

Hoy afirmo, sin vacilación, que por encima de los golpes aniquiladores que nos dió la represión; más contundentes fueron los golpes que asestaron nuestros propios camaradas al movimiento revolucionario con su conducta inconsciente, desleal y algunos delatora, para darle la ventaja a nuestros enemigos de clase.

Y otro argumento que agrego, que se puede considerar, fue el comportamiento sectario y antagónico que pudo prevalecer en las organizaciones revolucionarias que tuvieron las riendas de esta contienda armada, donde nunca pudieron conciliar intereses para concertar la Unidad Estratégica de los Revolucionarios.

Y pese a los infortunios, aún seguimos en la lucha.-

Alba Rosa Barreto